El dos de marzo de 2020 se inauguró en Mexicali un museo dedicado a la comida china. La apertura de cualquier museo es motivo de regocijo y de alboroto, pero hay que tener en cuenta que este el primero que se ha inaugurado en todo México durante la pandemia, dato mencionado en los discursos iniciales. El museo Wok es un proyecto del Instituto Municipal de Arte y Cultura de Mexicali y muchísimas personas colaboraron para que se transformara en realidad.
La comida china es típica de la capital de Baja California. Este hecho confunde mucho a los foráneos, porque obviamente proviene de China, ¿no? ¿Cómo podría ser la comida típica de una urbe como esta? Esto se explica fácilmente si echamos un vistazo a la historia de la ciudad, la cual comenzó a recibir un importante flujo de chinos deportados de Estados Unidos, sobre todo de San Francisco y áreas aledañas, a principios del siglo XX.
Estos migrantes diseñaron una comida específicamente para paladares norteamericanos, la cual inició en California y terminó en Mexicali debido a la migración. Al llegar acá, pronto se establecieron los primeros restaurantes de comida china en la región y la gente cachanilla le tomó el gusto muy pronto.
Hay restaurantes por toda la ciudad y en todas las presentaciones, desde lujosos establecimientos con un edificio imponente hasta puestos de comida exprés de costo sumamente accesible. En pleno siglo XXI, su presencia y calidad sigue siendo tan importante que por eso mismo se ha creado esta exposición; para educar, informar y preservar esta joya de la gastronomía nacional.
Actualmente la colección del museo incluye algunos de los letreros tradicionales de restaurantes históricos, artefactos que estuvieron en uno que otro de estos comedores y reconstrucciones de los platillos más usuales. También hay una sala temporal para arte que cuenta con obras de diferentes artistas, todas girando alrededor de esta fracción de cultura culinaria.
Sin embargo, aún es un espacio que tiene muchísimas oportunidades para crecer. Lamentablemente, la investigación sobre el tema aún es escasa, pero la existencia de un lugar como este catalizará más conocimiento y recuperación de testimonios y artefactos.
Pienso que hace falta ahondar aún más en los platillos, sobre todo los regionales. A pesar de que la comida china que comemos aquí se originó en San Francisco, California, muchos platillos han nacido en Mexicali. El bocón al vapor, inventado en el restaurante Misión Dragón, es un ejemplo. También sería importante mencionar los restaurantes más populares o prestigiosos que aún se encuentran en servicio en la actualidad.
Extiendo la invitación a todas las personas para que hagan su cita y se den una vuelta por esta nueva atracción. Sobre todo, para que lo tengan en cuenta al momento de traer a personas foráneas a conocer un poco de la cultura de Mexicali. Visitar el museo Wok y posteriormente llevarlos a comer a algún buen restaurante será una experiencia inolvidable.