Como es costumbre, las ciudades fronterizas suelen satisfacer las necesidades de nuestro vecino norte y el origen de la tradición de cerveza en Baja California no fue la excepción de esto.
A raíz de la ley seca en 1933, se establecieron cerveceras en la entidad que dejaron su huella y hasta la fecha siguen inspirando a los representantes de la bebida comercial y artesanal en Mexicali. El documental Cerveza artesanal de la serie “Nuestra B.C.” nos cuenta la experiencia de tres pioneros de esta industria en la capital.
Carlos Martínez relata que, gracias a la experiencia adquirida por trabajar doce años en una cervecera comercial, se le presentó la oportunidad de comenzar su propio proyecto en octubre del 2014, convirtiéndolo en lo que hoy es Brew Capital. Con su calidad en ingredientes, variedad entre sabores, creatividad y amargor se diferencian de las demás, buscando siempre que el primer encuentro de una persona con su producto sea agradable. De esas ganas de compartir la cultura cervecera nace su eslogan “Cerveza para todos”.
Uno de los espacios de cerveza artesanal más procurados por los jóvenes de Mexicali es sin duda Cerveza Fauna. Su música, iluminación, comida y la alta probabilidad de encontrarse a conocidos que de igual manera disfrutan de todo lo que ofrece es lo que lo ha hecho tan llamativo. Su fundador, Luis Larios, comenta que su proyecto partió de una inquietud personal y, de la mano de Home Brewing, comenzó a elaborar cerveza desde su casa a base prueba y error hasta conseguir lo que hoy tiene.
Por otro lado, la expo Feria del Dátil del Valle de Mexicali le abrió el camino Mario González para catapultar a Cerveza Ejidal. El cervecero fue invitado a participar en este evento debido a que era conocido por realizar cerveza casera utilizando dátil en una de sus recetas. Esto llamó la atención del organizador de la expo, pues le interesaba desarrollar productos derivados del mismo fruto.
Cuando esto ocurrió, el producto tuvo muy buena recepción aún estando mercado que no era cervecero y a pesar de que todavía carecía de estructura como marca. Como mercadólogo, Mario no solo presentó su proyecto como bebida sino como todo un concepto. El nombre “Ejidal” surge por ser un producto nacido en el Valle de Mexicali, ya que los mismos residentes se refieren a la comunidad como ejido.
Ya en el siglo veinte Baja California se comenzó a posicionar por su vocación cervecera y hechos históricos lo confirman. En 1921 llegó a la capital del estado Aztec Brewery Company, provenientes de San Diego, y solo dos años después llega la Cervecería de Mexicali, fundada por el sonorense Miguel González Quiroz y el tapatío Heraclio Ochoa. En ese entonces no existía una competencia en el mercado como al día de hoy, sin embargo, la comunidad siempre estuvo dispuesta a compartir su conocimientos e intercambiar sus sabores.
A pesar de la alta competitividad entre la variedad de cervecerías artesanales que existen actualmente, cada una de ellas se esfuerza por mantener su esencia y su estilo propio. Al desenvolverse en una comunidad de alto consumo, ofrecen bebidas hecha con los mejores ingredientes y procesos de la región.
El documental, disponible en el perfil de Facebook de la Secretaría de Cultura de Baja California, nos muestra el panorama sobre lo que hay detrás de todos estos sabores y experiencias, más que nada desde el trayecto y la inspiración de estos tres representantes. No se mostró a detalle el proceso de la elaboración de la cerveza, tampoco un vistazo de las instalaciones de cada local. Aunque todo fue más bien a base de percepciones personales, de igual manera es agradable que personas expertas en el tema compartan sus experiencias de primera mano y fomenten la apreciación del trabajo que hay detrás.
-Andrea Flores.
Muy buena reseña! Gracias por difundir la cultura cervecera en Mexicali y su valle!